miércoles, 28 de agosto de 2013

Mantenimiento de caldera de gas

Hoy, hace un rato, ha venido el técnico a revisar y mantener la caldera de gas. Ha hecho su trabajo bastente correctamente, así que no tengo queja personal de él. Es un currante como lo somos la mayoría y además sé de buena tinta que esta gente está bastante explotada. Ya explicaré porqué.

Pero sí que tengo una queja -al menos- contra la empresa que le envía.

Al final de la revisión me hace firmar CUATRO tiques sacados de una impresora portátil, de esas que imprimen en papel térmico. Luego me ha dado otros dos tiques como resguardo para mí.

- ¿No me das una hoja grande?
- Ahora ya no se entrega una hoja grande, sólo los tiques.
- ¿Y cómo archivo yo esto? (mi archivador es de agujeros y DIN A4).
- Sólo se dan hojas grandes cuando se ha averiado la impresora. (Luego me suelta un rollo para explicarme que la mayoría de otras empresas de la competencia, que revisan calderas, sólo entregan también tiques).

El problema para su archivado puede ser menor. Se trataría de grapar o pegar esos dos tiques (ya grapados por el técnico) en una hoja en blanco DIN A4, hacer los agujeros en esta y archivarla junto a otros documentos de la casa.

Hay otro problema que me preocupa más: el papel térmico se va borrando con el tiempo. Es decir, con un poco de mala suerte, si alguien (una Administración) me pidiera demostrar que he hecho el mantenimiento anual, podría tener que entregarle un papelito en blanco que no demostrara nada...

Por supuesto hay soluciones: ir a la papelería a que me hagan una fotocopia de los tiques, o escanearlos (si tienes escáner en casa) e imprimirlos (si tienes impresora). Una alternativa intermedia es guardar lo escaneado en el disco duro y pasarlo a papel sólo si hace falta en el futuro.

En cualquier caso, el cliente tiene que hacer un esfuerzo suplementario para asegurarse que puede demostrar que cumplió con su obligación y que la caldera estaba correcta.

Otro aspecto gracioso, por llamarlo de algún modo, de la visita fue cuando el técnico me dice que la caldera es antigua y "ya está muy tocada". En otras palabras, que como tiene 18 años (ya ha llegado a la mayoría de edad, parece ser) conviene cambiarla. ¡Qué coincidencia que la empresa para la que trabaja se dedique, además de a revisiones, a vender e instalar calderas de gas!.

Además, las reparaciones de la caldera, caso de haberlas, están incluidas en el contrato con la compañía de gas. Así que serían previsibles menos averías con una caldera nueva y eso también iría en beneficio de la compañía de gas.

Me imagino que mucha gente bienintencionada, al decirles esto el técnico, y por cierto temor al gas, le preguntarán que tienen que hacer para cambiar la caldera. Ya está el gato en la talega...

Yo le he dicho que me bombardean continuamente para que cambie cosas: que cambie de coche, de muebles de cocina, de electrodomésticos,... y ahora de caldera. Y que mi filosofía es hacer durar las cosas hasta que ya no se pueda más (por falta de repuestos, por haber alternativas que gastan MUCHA menos energía, porque la reparación costaría más que uno nuevo, etc.). Eso mismo haré con la caldera. Con un mantenimiento anual como exige ahora la Ley y una revisión oficial cada cinco años (eso me ha dicho el técnico), la caldera debería ir funcionando correctamente hasta que no queden repuestos por descatalogada. En ese momento tal vez no me quede más remedio que cambiarla. Pero hasta ahora lo que me ha demostrado es que es una caldera robusta y que funciona muy bien (buena eficiencia energética).

¿Cuánto cuesta una caldera nueva?

Recuerdo  que cuando empezó a usarse masivamente el gas en España, una caldera nueva venía a costar 400.000 pesetas (unos 2.400 €). A pesar de haberse popularizado, y de la competencia que introduce la diversidad de marcas en el mercado, no han bajado de precio. Creo que ahora están en unos 3.000 €, aunque no sé si esto incluye la instalación o no.

Para que la diferencia entre lo que consume actualmente mi caldera y lo que consumiría una de última generación (y esas a lo peor cuestan más de 3.000€) me haga interesante el cambio de caldera, el ahorro tendría que ser mayor de 3000€ en los próximos años. Es mucha diferencia que no creo que se produzca tan fácilmente. Aparte del desembolso que supone esa cantidad para un bolsillo débil como el mío.

Ojo al dato, que aquí todos nos empujan a un consumismo sin sentido.

Si queremos proteger el planeta y, de paso, nuestro bolsillo, nuestras compras deben ser racionales y estar basadas en información veraz y no sesgada, como la que te ofrece aquél que está interesado en venderte algo.

Otro ejemplo: los concesionarios de coches han pedido al gobierno poder hacer revisiones ITV (Inspección Técnica de Vehículos). Está claro que aquí se pretende algo parecido: poner palos en las ruedas del consumidor para que, buscándole problemas donde no los hay, no le quede otro remedio que cambiar de coche. ¡Qué coincidencia que los concesionarios vendan coches...!
Por último, voy a dirigirme a la compañía de gas y a la Junta de Castilla y León (competente en esta materia) y al Defensor del Común (una especie de defensor del ciudadano frente a las administraciones) para exigir que cambien el sistema de papel térmico por otro más estable.

1 comentario:

Paco Huertas dijo...

Genial tu artículo, como me he visto reflejado cada vez que me llaman para la revisión de la caldera. Yo iluso de mi, tengo dos seguros: el obligatorio, y otro que cubre todo, que entre el iva y las tarifas fijas,creo que pago más en flecos que en gas.
Buen trabajo.
Un saludo.
Paco Huertas. Granada.