Pero, de pronto, todo se precipitó. En el último momento decidimos tomarnos una semana de vacaciones fuera de nuestra ciudad, y había que buscar alojamiento.
Con el asunto de que yo estaba trabajando esos días y en casa anduve ayudando a mi esposa a buscar en internet un alojamiento de última hora (¡en agosto para agosto!); por mirar y comparar precios de neumáticos en más de un sitio, y debido a otros quehaceres que en una casa de familia numerosa nunca faltan, no pude hacer el cambio de ruedas antes de salir de viaje, como a mi me habría gustado, por ir más tranquilo.
Encontramos finalmente un alojamiento en Peñíscola, así que decidí hacer el cambio de los neumáticos en el destino, aunque había que ir más allá de Benicarló, que es la población más cercana. Me estoy refiriendo a un establecimiento especializado en neumáticos al lado del Carrefour de Benicarló, llamado NORAUTO.
(Aunque inicialmente pensé que estaba cerca de nuestro alojamiento, al final el recorrido fueron casi 20 km de ida y otros tantos de vuelta).
La ventaja de este tipo de establecimientos frente a los talleres profesionales es que disponen en almacén de casi todos los modelos de ruedas y tienen precios más ajustados porque compran grandes volúmenes. Al menos, esa es la teoría.
La persona que me atendió, un tal Manuel («Manu» en la factura) me hizo un presupuesto de dos calidades de ruedas: una GOODYEAR y otra de su marca, NORAUTO. La diferencia de precio entre unos neumáticos y los otros era pequeña: 14 euros entre los dos, así que me decidí por los de marca GOODYEAR.
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El asunto de mi descontento viene a continuación cuando, ya montadas, reviso las ruedas y observo que no son marca GOODYEAR sino DUNLOP. Bien, no entiendo mucho de ruedas, pero mientras DUNLOP no me sonaba mucho, GOODYEAR me sonaba mucho más conocida. Después he descubierto que DUNLOP tiene una larga historia y que recientemente fue adquirida (o se fusionó) con GOODYEAR. Por tanto, no se puede decir técnicamente que se trate de una estafa. Pero en las ruedas no pone GOODYEAR sino DUNLOP, por algo será.
Yo creo que estos comerciales, sabedores de que una marca suena más y mejor que la otra, ponen ese nombre en el presupuesto, para que sea más atractivo al posible comprador.
Le hice notar que en el presupuesto estaba escrito GOODYEAR y no DUNLOP. Se quedó como helado durante unos instantes. Luego recuperó el habla y salió del paso diciendo que eran la misma empresa.
Pero en este caso había algo más: los neumáticos que me estaba ofertando ya eran un poco viejos, es decir, llevaban demasiados meses en el almacén y seguramente el comercial quería quitárselos de encima. Esto sería un agravante del engaño, ya que no me dijo nada del asunto hasta que yo lo detecté una vez estaban las ruedas montadas.
¿Cómo se sabe la fecha de fabricación de un neumático? En la propia rueda viene escrita en formato SSAA, donde las SS son la semana de fabricación (uno o dos dígitos) y las AA son el año (dos dígitos). Así, mis ruedas presentaban el valor 3913, es decir, fabricadas en la semana 39 del año 2013. La semana 39 del año 2013 correspondió a la 4ª semana de septiembre (y octubre aún no empezaba hasta la semana siguiente).
Le hice notar al comercial la edad de las ruedas y me dijo que el año tenía 58 semanas (otra mentira: en realidad tiene 52, y así se lo recordé) y que ellos no tenían neumáticos de más de seis meses de antigüedad. Yo le hice un cálculo rápido: octubre, noviembre y diciembre de 2013, son tres meses, y otros siete hasta julio de 2014, hacen un total de 10 meses. Es decir, otra mentirijilla del comercial. Observé que se quedaba sin palabras. No es que sea una burrada de tiempo para un neumático que ha estado sin montar y en reposo, pero ya es un intervalo notorio.
Si se quieren quitar de encima unas ruedas que ya tienen bastantes meses desde su fabricación deberían hacer unas ofertas económicas mejores y dejarle claro al cliente el porqué de la oferta, para que elija. Lo otro es manipulación, por no llamarlo claramente engaño.
Podría haberles demandado un cambio de esas cubiertas por otras, que en este caso serían de inferior calidad, como las de su ofertada marca NORAUTO, ya que (me lo había dicho antes) no tenían más marcas con la referencia necesaria. O podría haber exigido reponer las cubiertas viejas, la devolución del dinero, y haberme ido a otro sitio a montarlas. Pero todo ello sólo suponía, a la larga, más problemas, complicaciones y tiempo. Ellos me habrían puesto todo tipo de zancadillas para recuperar mi dinero y mis viejas cubiertas. Y no olvidemos que yo estaba allí de vacaciones, para estar en la playa, no peleándome con esta gente y visitando talleres de ruedas.
Por comprobaciones posteriores he observado que tampoco las ruedas fueron especialmente baratas. El mismo modelo y marca de ruedas está en internet (agosto de 2014) a 47,54€ incluyendo IVA, ecotasa y transporte, como se puede comprobar en esta captura de pantalla:
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El montaje, equilibrado y válvula (unos 12€ por rueda) lo dejo aparte ya que viene a ser el precio en cualquier taller (aunque no deja de parecerme excesivo).
(En el tique que adjunto puede verse que pagué en efectivo, lo cual suele ser mi costumbre, como he dicho en otras entradas, para que el beneficio se lo quede el que lo trabaja, no los bancos).
Otro asunto que no me agradó fue comprobar más tarde que el teléfono de atención al cliente de esta compañía fuera un 902. Como ya dije en otra entrada, cuando veas un 902 y ningún otro teléfono alternativo (un fijo), puedes sospechar que están dispuestos a robarte, ya que en estos detalles es donde las empresas se retratan sin darse ellas cuenta.
Curiosamente, esa página de la captura de pantalla (www.muchoneumatico.com) ofrece un teléfono 900 (=gratuito) para las consultas de los clientes. Luego habrá que ver si la atención recibida es acorde, pero al menos me parece un detalle digno de reconocimiento.
En definitiva: planea con tiempo tus vacaciones y evita las decisiones de compra de última hora. Pero, ante una situación de peligro, como pueden ser unas ruedas desgastadas, es mejor aflojar el bolsillo y pagar la seguridad que haga falta, incluso aun cuando eso suponga hacer un poco el pardillo y comprar mal.
Una vida humana vale más que todo el dinero del mundo.